En el verano del año 1968 nos juntamos varios amigos para ver donde
pasábamos mejor la tarde, surgió la idea de ir bañarse para disfrutar de un
buen baño y pasar la tarde lo mejor posible.
Comprobamos todas las balsas del pueblo, la única con agua para tal
evento era, nada más y nada menos, que la del Cejor y a ella nos dirigimos...
Marchamos por la Ramblilla, que con el chorrillo de agua que
transcurría por ella, las cañaveras se andaba cómodamente; chapoteando el agua
y además muy fresquito. El río era otra cosa ya que no bajaba agua y había que
tratar de protegerse del Sol.
Llegamos al comienzo del Cejor y
todo cambiaba, el aire fresco del mar que subía a través de ese embudo o cañón
que forma desde las fuentes de Marbella a Benínar, ese lugar idílico para
sentarse y leer un libro en silencio, sólo roto por los cantos de las aves, las
torcaces revoloteando en los tajos y el aire sobre los tarajes y cañaveras. Hoy
en día ese lugar ya no es ni parecido. Ha perdido casi todo, menos esos tajos
que sólo nos dicen con nosotros no habéis podido.
El la fuente del Cejor bebimos agua fresquita y descansamos un rato. Subsanada
nuestra sed, seguimos río abajo viendo ya muy cerca el espolón y próximo a nuestro
destino. Bajábamos contemplando las maravillas de los desfiladeros que teníamos
a un lado y a otro, así como la robustez del espolón, que por la peculiar
composición de sus rocas le había ganado la batalla al río haciendo que las
aguas no llegasen tan deprisa al mar.
Y enseguida nos encontramos con la balsa del Cejor, algo nada corriente,
pues fue construida entre rocas y tajos. Durante muchísimos años de esta balsa
no se perdía ni una sola gota de agua, la llenaban en el invierno para tener agua
en verano y regar los bancales que había río abajo, en la margen derecha con
sus naranjos, otros frutales y su huerta.
En una de las rocas que formaban parte del muro de la balsa posaron mis
amigos José Mari, Paco el de Adelaida, Fausto, su hermano Paco, Antonio Callejón
y quién hizo la fotografía: José Molina.
Un buen baño.
Un gran día.
Y un grato recuerdo.
José Molina / Pepe Agus.
Como para saber quienes son los de la foto.
ResponderEliminarPara que veas Pedro los estragos que hace el tiempo en las facciones de las personas,yo por aquel entonces tenia 24 años y aquellos lugares eran para mi exoticos.Claro que mas estragos ha hecho la mano del hombre con la disculpa del progreso y los que seguira haciendo.
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